Sculptra® es el nombre comercial de un tratamiento estético inyectable a base de ácido poli-L-láctico (PLLA), un compuesto biocompatible y biodegradable que estimula la producción natural de colágeno en la piel. A diferencia de los rellenos dérmicos tradicionales que aportan volumen de forma inmediata, Sculptra actúa progresivamente al activar la síntesis de colágeno endógeno, mejorando la firmeza, la densidad y la textura cutánea con resultados que pueden durar hasta dos años.
¿Para qué se utiliza Sculptra?
Sculptra se utiliza principalmente en tratamientos faciales para combatir los signos del envejecimiento relacionados con la pérdida de colágeno y volumen. Entre sus aplicaciones más comunes se encuentran:
- Corrección de la flacidez facial leve a moderada.
- Mejora de la estructura de las mejillas, sienes y mandíbula.
- Atenuación de líneas de marioneta, pliegues nasolabiales y arrugas superficiales.
- Reafirmación global del rostro en pacientes con pérdida de densidad dérmica.
Aunque su uso principal es facial, algunos profesionales lo aplican también en otras zonas como el escote, glúteos, parte interna de brazos o muslos, buscando estimular colágeno en áreas con flacidez o pérdida de volumen.
¿Cómo funciona?
Una vez inyectado, el ácido poli-L-láctico actúa como estimulador. No proporciona volumen de forma inmediata, sino que provoca una respuesta inflamatoria controlada que activa los fibroblastos responsables de sintetizar colágeno tipo I. Esta neocolagénesis es gradual y, generalmente, se requieren varias sesiones espaciadas (cada 4 a 6 semanas) para alcanzar resultados visibles y duraderos.
En las semanas posteriores al tratamiento, el organismo comienza a producir colágeno en las zonas tratadas, lo que mejora de forma natural la densidad y firmeza de la piel. Con el tiempo, el PLLA se reabsorbe por completo sin dejar residuos.
¿En qué se diferencia de otros tratamientos?
Lo que distingue a Sculptra de los rellenos con ácido hialurónico es su capacidad para generar un cambio estructural en la piel a medio y largo plazo. Mientras que el ácido hialurónico aporta volumen inmediato que se va reabsorbiendo con el tiempo, Sculptra actúa como bioestimulador, mejorando la arquitectura cutánea desde adentro. No rellena directamente, sino que induce al cuerpo a producir su propio colágeno.
Además, los resultados no son instantáneos, lo que permite una transformación progresiva y natural. Su duración también es superior a la de muchos otros tratamientos, con efectos visibles hasta 24 meses después de la última sesión.
¿Cuántas sesiones se necesitan?
La cantidad de sesiones varía según el grado de flacidez y la edad del paciente, pero por lo general se recomiendan entre 2 y 4 sesiones, con un intervalo de aproximadamente 4 semanas entre cada una. Los resultados se consolidan a lo largo de los meses y pueden mantenerse con sesiones de mantenimiento anuales.
¿Quiénes son candidatos ideales?
Sculptra está indicado para hombres y mujeres que desean mejorar la calidad de su piel y recuperar firmeza de manera progresiva, sin cambios drásticos inmediatos. Es especialmente útil en personas a partir de los 35 años, cuando la producción de colágeno comienza a disminuir notablemente.
No está recomendado en casos de piel muy delgada, trastornos autoinmunes activos, embarazo o lactancia. Tampoco debe combinarse con ciertos tratamientos agresivos o en zonas con infecciones activas.
¿Tiene relación con el colágeno?
Sí, la relación es directa. Aunque Sculptra no contiene colágeno en su fórmula, su principal acción es estimular su producción natural. Al activar los fibroblastos dérmicos mediante una respuesta inflamatoria controlada, consigue aumentar la síntesis de colágeno tipo I, lo que genera un efecto reafirmante sostenido.
Para potenciar los resultados, muchos especialistas recomiendan complementar el tratamiento con una dieta rica en vitamina C o incluso con suplementos de colágeno hidrolizado, que aportan los aminoácidos necesarios para que el organismo pueda sintetizar colágeno eficientemente.
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